Regata IV Trofeo Porto de Marín (II)


Viendo la estrategia de los demás, decidimos tratar de quedarnos haciendo bordos en el centro de la ría y acercarnos al Festiñazo para aprovechar que esa zona es la de mayor corriente en la vaciante de la marea. (Lo se, porque encontré una tesina de una chica de la Universidad de Vigo que hablaba de las corrientes en la Ría de Pontevedra).
A medida que hacíamos bordos el viento subía, y de los 1,3 nudos de media a la salida, llegamos a Morrazán con 3,4 de media. Tras doblar la baliza, nos quedaba una popa cerrada, por lo que subimos el asimétrico, para desgracia nuestra el viento volvió a quedarse y ante la desesperación intentamos de todo, hasta abrir el génova por babor y atangonarlo con el bichero mientras el asimétrico volaba por estribor. Finalmente, al ver que no había rival, optamos por dejarnos de “caralladas” ya que había que ir tremendamente atento al llevar las tres velas, cerramos el génova y finalizamos la etapa como primeros en nuestra clase. El único rival que teníamos, al que ni vimos, porque estar, debía estar, ya que en la clasificación final obtuvo un DNF.
No mola ganar con tan pocos rivales, pero bueno, le resta parte a la satisfacción de hacerlo, pero bueno, que nos quiten lo bailado. Ahora, la semana que viene, en teoría, con acabar dentro del tiempo límite nos debe llegar para llevarnos la prueba, así que allí estaremos.